miércoles, 12 de mayo de 2010

¿Qué recorte se aplicará al sueldo del principal funcionario vitalicio del Estado?

El ajuste aplicado por Rodríguez Zapatero a su política económica, por muy duro que pueda parecerles a algunos, no será tan drástico como el que tuvieron que soportar los países más pobres del mundo. Aquí no se toca sustancialmente el gasto social, a diferencia de las fuertes restricciones en ese capítulo impuestas en su día por el Consenso de Washington para “meter en cintura” a las economías del Tercer Mundo. Entre las medidas más crudas figura el recorte de los sueldos de los funcionarios, un 5% de media y un 15% a ministros y altos cargos. Pero lo que todavía no se ha especificado es el alcance del recorte del sueldo del principal Funcionario Vitalicio del Estado: el Rey.


No será un gran estratega, pero hay que reconocerle a Rodríguez Zapatero su gran capacidad de maniobra táctica: cada día dice lo contrario que el día anterior, y así, de derrota en derrota hasta el harakiri final. Presionado por “los mercados”, por los dirigentes de mayor peso de la UE y hasta por el “amigo americano”, Zapatero se ha visto obligado a dar un golpe de timón a su política económica y afrontar una política de ajuste del déficit público.

Es obvio que las medidas adoptadas por el Gobierno no pueden ser consideradas "progresistas" (eufemismo que disimula el desvanecimiento de la izquierda), como hubiera sido gravar los grandes capitales, por ejemplo esas sicavs donde invierten los ricos, que tributan al 1%. Una realidad ante la cual no hay protestas generalizadas

No obstante, exageran los que hablan de “ajuste duro” para calificar las medidas del Gobierno. Y si no, que les pregunten a los países pobres que tuvieron que afrontar los planes de ajuste estructural impuestos en su día por el Fondo Monetario Internacional siguiendo las recetas del Consenso de Washington. Un consenso alcanzado a comienzos de los años 90 del pasado siglo por los países más poderosos del planeta con el propósito de “meter en cintura” a las economías del Tercer Mundo. Medidas económicas que implicaban fuertes restricciones del gasto social como condición impuesta por el Fondo para concederles su ayuda.

Aparentemente, Zapatero ha jugado bien sus cartas. Adopta dos medidas crudas: reducir el salario a los funcionarios y congelar la revisión de las pensiones. Congelar no equivale a reducir "a la griega". Y ni siquiera está claro que pueda hacerlo, ya que para ello necesitaría modificar la ley de consolidación y racionalización del Sistema de Seguridad Social de 1997, que estableció que las pensiones serán revalorizadas al comienzo de cada año en función del correspondiente índice de precios al consumo.

Pese a estas medidas, el presidente del Gobierno se reserva la carta de afirmar que mantiene su compromiso social: ya que el ajuste no toca las prestaciones por desempleo, ni la sanidad ni la educación. Dejando, además, abierta la revisión de las pensiones mínimas, que afectan a unos 3.000.000 de jubilados. Aunque es de esperar que se trate de una revisión simbólica. En cualquier caso, no da pie a una rebelión generalizada de la ciudadanía.

Con esta táctica, al tiempo que se granjea los parabienes de las instituciones de la UE y del mundo de los negocios, le quita argumentos a Mariano Rajoy, que continúa encasillado en su habitual postura del No a Todo, y también a los sindicatos. Si éstos organizan protestas, serán sólo para defender a los funcionarios. Y con cuatro millones de parados en el país, defender que unos funcionarios con empleo vitalicio y salario pagado por el contribuyente no aporten un 5% para salir de la crisis no despierta excesiva simpatía en la opinión pública. Opinión que viene siendo convenientemente masajeada por los medios ultraliberales, que diariamente lanzan pestes contra el funcionariado.

¿Se pondrán Mariano y la ultraliberal condesita Aguirre a la cabeza de las previsibles manifestaciones de protesta de los funcionarios? ¿Propondrán un programa alternativo de subida de las pensiones mínimas?

El Gobierno ha dicho que el recorte de los sueldos de los funcionarios será de un 5% de media, pero que afectará en mayor medida a los altos cargos. De entrada, un 15% en el sueldo de ministros y altos cargos. Que no por ello se van a quedar sin poder ir al cine.

Hablando de funcionarios, todavía no se ha especificado la cuantía del recorte del sueldo del principal Funcionario Vitalicio del Estado: el Rey. Tal vez no se haya querido comunicar todavía por no darle un disgusto justo cuando convalece de una operación quirúrgica. Realizada, por cierto, por una clínica privada que ha utilizado los medios del Sistema Público de Salud.

4 comentarios:

  1. Y ¿qué pasa con las subvenciones a las entidades religiosas? ¿Por qué no pagan IVA, como todo el mundo y por qué de los presupuestos generales salen partidas para subvencionar sus actividades parroquiales o en las mezquitas, sus arreglos de tejados y rehabilitaciones de sus imágenes? ¿Por qué hay que dar ingentes cantidades de dinero a un estado llamado Vaticano que ni produce ni aporta nada más que intromisión en los avances de leyes como el aborto o el matrimonio homoxesual, por ejemplo?
    Es este país sobra rey y sobra toda religión; el que tenga vicios, que se los pague.
    Salud.

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  2. Hombre, Rafael del Barco Carreras, acabo de suprimir su comentario. No porque discrepe o censure el mismo, sino porque me parece de todo punto improcedente que aproveche la ocasión para "parasitar" mi blog colocando no ya un comentario, sino el largo post que inserta en el suyo. Como la hembra del cuco que coloca sus huevos en nido ajeno. Transcribo el comienzo del mismo.... y quien esté interesado en leerle, puede acudir a su blog.

    13-05-10. No quiero pecar de pedante, ni menos admitir que fuera catastrofista, pero lo repetía en mi castigada web www.lagrancorrupcion.com antes de las elecciones del 2008, cuando oficialmente la Crisis era una turbulencia culpa de las hipotecas ninja americanas. No solo yo, cualquier ex promotor inmobiliario con mínimos conocimientos académicos de economía, y libre de ataduras y condicionantes político sociales, comentaba con solo mirar tanta grúa y echarle un vistazo a las estadísticas de producción y venta de viviendas, y máxime observando la escalada de precios de un mercado que no vendía, y lo vendido mal y hasta delictivo, que “esto reventaría”............

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  3. Cuando se habla de funcionarado habría que hacer una gran distinción entre empleados públicos, la gran mayoría mil o casi mil euristas, y los grandes popes de la Administración, esos grandes cargos elegidos la mayoría a dedo y por partidismo, exentos de haber pasado una oposición durisima y con derecho a percibir varios salarios, vengan de donde vengan y bastante elevados, por cierto. Los primeros llevan en crisis permanente tanto en épocas de vacas gordas como en épocas de vacas flacas. Los segundos viven en la opulencia tanto en época de vacas gordas como en época de vacas flacas. Ahora estos segundos acuerdan que los culpables de la crisis son los primeros y dan ejemplo descontandose de un sueldo millonario unas migajas para quitarles a los primeros un gran pellizco de su miserable sueldo. Y digo miserable porque en época de bonanza ecónomica quien no conoce a un funcionario al que su vecino le dijese sin inmutarse: "yo por tu sueldo ni me levanto" Un vecino cualquiera con un oficio normal (no digo cuales, pero la mayoría) con su coche de media-alta gama y sus vicios de nuevo rico. Ese vecino poco preocupado por un futuro incierto, creyendo que esto era el cuento de nunca acabar le hacen ver a los primeros como los grandes culpables de su situación. Todo está atado y bien atado por los segundos.

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  4. ¿Dónde está la izquierda? La derecha no hace mas que ruido, ruido por todo. Ahora parece que las últimas medidas del gobierno deberían ser más de su agrado. Pero nada. Todo es elevar el ruido y conseguir el poder. En cualquier caso esto ya no es nuevo. ¿Dónde está la izquierda? En época de crisis es cuando todo lo que Marx teoriza no es ya evidente, sino que nos estalla en la cara. ¿Dónde está la izquierda para explicar que no se trata de ajustes de aquí y allá, que se trata del sistema capitalista, que vivimos vendidos a lo que otros quieran disponer con lo más sagrado que tenemos, nuestro trabajo, dónde está dispuesta a enseñar, convencer, ahora que cualquiera entendería ante tamañas evidencias, e intentar evitar que el parado desesperado acuda a dar su voto a sus verdugos del PP? Y me refiero a toda la izquierda, sindicatos, los que a duras penas merecen el calificativo o la izquierda más ortodoxa. Sin Marx bien agarrado en la cabeza todo es amortiguar golpes y poner la otra mejilla. Y atreverse a hablar con nuestros conceptos, con los suyos siempre ganarán ellos.

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